Black Hawk Down

Menudo susto se han llevado Mariano Rajoy y Esperanza Aguirre este mediodía (así como los cuatro ocupantes más del helicóptero en el que viajaban), al caer repentinamente al suelo tras acabar de despegar. Afortunadamente, salieron todos ilesos (exceptuando el dedo roto de Rajoy) del accidente, pero como bien ha dicho Aguirre "nos podíamos haber matado todos".
Como soy un malpensado, estoy seguro que a algún que otro sector político le habrá hecho gracia la noticia (aunque hubiesen preferido que viajasen también en la cabina Acebes y Zaplana...). Es broma, pero seguro que mañana en la Cope no faltarán este tipo de observaciones...
Pero para declaraciones fuera de lugar, las de Borrell: "eso les pasa por ir a los toros en helicóptero", aunque ya se ha apresurado a pedir disculpas por ellas. Aunque lo francamente preocupante de todo esto es saber que un aparato de la misma empresa perdió una ventanilla en un vuelo el pasado agosto... Y ya estamos en lo de siempre: la chapuza española.
Tampoco deja de ser curioso que tras el atentado fallido a Aznar, sea ahora Rajoy que se salve de una muerte casi segura. Será que los presidentes del PP tienen una flor en el culo.
Pensaba titular este post "Aterriza como puedas", pero se me acaba de ocurrir un título más apropiado: "Black Hawk Dawn" (aquella excelente película de Ridley Scott en la que la caída de un helicóptero en Somalia provoca una matanza sin precedentes).
Me permito bromear sobre este asunto porque al final todo se ha quedado en un susto, por suerte. ¿Pero qué hubiese pasado de fallecer Rajoy y Aguirre? Mejor no pensarlo, porque me echo a temblar...