16 de julio de 2007

Mi Summercase 2007


La verdad es que no lo empecé con demasiado buen pie. El viernes llegué pasadas las diez, cuando ya había empezado PJ Harvey, y la carpa donde tocaba estaba tan llena (¿a quién se le ocurre montar una carpa en verano?) y hacía tanto calor dentro que no quise ni intentar adentrarme en ella. Lo malo es que fuera de ésta se oía fatal, pues se escuchaba más el escenario de al lado que el de la propia PJ... Además, fue la misma artista la que exigió tocar allí, en vez de en un escenario más grande como hubiera sido de recibo... Más tarde me enteré que si hubiese entrado por la parte izquierda hubiese tenido más suerte.
Para consolarme, me acerqué a ver a los franceses Phoenix (su cantante es el novio de Sofia Coppola) que me sorprendieron gratamente. De allí bajé al escenario de los Flaming Lips, y me lo pasé bomba con su delirante espectáculo (era la tercera vez que los veía). Lo mejor, el inicio, en que el vocalista Wayne Coyne se mete en una bola gigante y pasea por encima del público. Y luego, los globos gigantes, el confetti, los papás noel bailarines...
Acto seguido volví al escenario principal para disfrutar de los canadienses Arcade Fire. Los vi desde lejos, pero sonaron de fábula, y fueron de lo mejor de la jornada, junto a los Scissor Sisters.
Luego vi un par de temas de Bloc Party, que no me matan demasiado, y me dirigí a la carpa para escuchar a LCD Soundsystem. De nuevo un calor infernal, por lo que me quedé en el borde de la carpa, a la izquierda. Ya había visto a James Murphy en su reciente visita anterior, pero disfruté igualmente de su electrónica-punk rompepistas.
De allí de nuevo al escenario principal, para ver lo que a mi juicio fue lo mejor de la noche: los Scissor Sisters. Con un sonido impecable y una actitud todavía mejor, su concierto puso a bailar hasta los muertos (y eso que me dolía la barriga). El público entregado, osos incluídos (unos cuantos por cierto). Acabaron poco antes de las cinco de la madrugada, y me volví a casa con el tranvía (resulta que el metro no funcionaba porque estaban de obras: ¡bravo señor Hereu!). Fue un trayecto hasta las Glorias inenarrable, con un tranvía a reventar, que se paraba minutos eternos en cada puta estación porque no se cerraban las puertas. Una nueva vergüenza de este lamentable ayuntamiento que tenemos...
El sábado por la tarde, también en el tranvía, se volvió a liar, al atropellar éste (de nuevo lleno hasta lo inimaginable) a una moto con dos ocupantes... Encima el conductor no nos dejó salir hasta el cabo de unos minutos... Cuando por fin nos liberaron, me acerqué para ver a los heridos (por cierto, no he visto ninguna noticia del accidente), que estaban echados en el suelo, y vi que uno de ellos tenía el pie ensangrentado. De la moto, ni rastro. Oí que unos comentaban "le he visto el hueso hasta el metacarpio...". En fin, tuve que llegar al Fórum caminando, porque los autobuses estaban atestados y ni paraban, y no había ni un solo taxi... Lo dicho, Barcelona la ciudad más tercermundista del mundo mundial. Eso sí, a regalarle millones a Woody Allen para que ruede su película, en vez de gastarse la pasta en mejorar los transportes públicos...
Ya en el Fórum, pude ver a los veteranos James, con su cantante Tim Booth con un look de lo más extraño (rapado y con perilla, con pinta enfermiza y extraño bailoteo). No estuvieron mal, pero me tuve que ir antes de que acabaran para entrevistar a los Kaiser Chiefs en el Hilton. Me tocó al teclista, Peanuts, de lo más simpático.
De nuevo en el recinto, pude ver la última canción de Jarvis Cocker, una versión del clásico de Rocky "Eye of the tiger" (brutal). Luego disfruté de los Jesus and Mary Chain, pese a alucinar con la pinta envejecida de su cantante (de lo más arisco por cierto). Pese a lo que se había rumoreado, Scarlett Johanson no hice coros en "Just Like Honey". Se me acabaron haciendo un pelo aburridos, pues todos los temas sonaban muy parecidos.
Más tarde vi un par de temas de los soporíferos galos Air, y me dirigí de nuevo a la carpa para escuchar algo de OMD. Mariconeo por un tubo que me aburrió soberanamente, y me fui a descansar un rato a la zona de prensa, esperando a los Kaiser Chiefs. Estos me gustaron, pero no me convencieron tanto como en su anterior visita. Y de allí a los Chemical Brothers, que vi sentado encima de una colina pelada, con gente que no paraba de resbalar a mi lado. Los Chemical en directo son el timo perfecto: no hacen absolutamente nada, pero eso sí, los audiovisuales molan.
Y pasadas las cinco me volví a casa en el coche de un colega. Como no, el tranvía volvía a ser una lata de sardinas...

2 comentarios:

Anónimo dijo...

No has 'rajat' de la bazófia de menjar que venien. Estàs en baixa forma!
EL QUE ENCARA BABEJA RECORDANT A LA PJ

Anónimo dijo...

I del transport públic només tres míseres línees. ¿I tu et fas dir el azote del alcalde Hereu? Molt baixa forma!!!!

(El que es va comprar una samarreta rosa d'Antony perque está molt segur de la seva masculinitat)