Una tarde en los toros

Ayer domingo fui a ver mi primera corrida en la Monumental de Barcelona. No es que sea un amante de los toros (tan solo había visto una corrida anteriormente, hace años, en el Burgo de Osma), pero dejando de lado consideraciones éticas importantes (el sufrimiento del animal, que en varias ocasiones mugía de dolor), me interesaba vivir el ambiente de una corrida de primera línea.
El cartel era bueno: Fran y su hermano Cayetano Rivera Ordóñez, así como el (para mí) desconocido David Fandila, un granadino más conocido como "El Fandi". Huelga decir que fue justamente éste el que realizó la mejor faena de los tres, especialmente su primer toro, que fue espectacular. Además, El Fandi no usó bandilleros, y se encargó personalmente de colocar cada una de ellas. Al final cortó una oreja (y no se sacó otra porque en el segundo toro mató mal). El más flojo de la tarde fue Fran Rivera Ordóñez, que no empezó demasiado fino, pero que acabó de manera digna. Mejor estuvo su hermano Cayetano, que no ganó ninguna oreja porque mató mal en ambas ocasiones.
El gran problema de dicha corrida es que los toros fueron malísimos: mansos, no embestían y doblaban las patas continuamente.
Y lo peor de todo, como suele ser habitual, los picadores, que se ensañaban en exceso desde lo alto de su caballo (a punto estuvo de descabalgar en más de una ocasión, por cierto).
Aquí van unas cuantas fotos de la velada: