Sábado 30 de mayo: el DÍA del Primavera Sound

Sí señores. El DÍA por excelencia del próximo Primavera Sound (festival al que le tengo una cierta tirria por su tufo modernillo, no lo negaré) es el sábado 30 de mayo. ¿Por qué? Ni más ni menos porque tocarán Neil Young (en un concierto de dos horas y media, según ha manifestado el canadiense) y los Jayhawks. Bueno, también lo harán Sonic Youth, aunque no soy gran fan de ellos.
O sea que el próximo 3 de marzo me compro la entrada para ese día.
Dios mío, entre AC/DC (al final tengo entrada confirmada gracias a un colega), Metallica, Madonna y ahora estos dos cracks, intuyo que va a ser un año glorioso en cuanto a directos...

La quinta temporada de Lost: de menos a más

Empezó floja, muy floja. Visto el nivelazo de la cuarta temporada (para mí la mejor de todas), los dos primeros episodios de la quinta temporada de Perdidos me decepcionaron tremendamente. Pero acabo de ver el séptimo, y puedo afirmar que cada uno ha sido mejor que el precedente. Si el sexto ya fue un despiporre, este último, con John Locke de absoluto protagonista, también ha sido antológico.
Eso sí, la trama en esta última temporada ha dado un giro radical hacia la ciencia ficción, y entenderla es casi una odisea de lo enmarañada que está... Pero los guionistas siguen haciendo auténticos malabarismos para ir ligándolo todo, y se aprecian más guiños que nunca a la primera temporada.
Quien nos iba a decir el derrotero tan demencial que tomaría esta grandísima serie... Y es que en esta nueva temporada, ni las clásicas estructuras de flash back (o forward) se cumplen...
En fin, si el próximo episodio sigue la tónica de los anteriores, será grandioso. Pero me temo que es muy difícil mantener este nivel. Veremos que nos depara el futuro, pero lo cierto es que tras un decepcionante inicio de temporada, Lost me ha vuelto a entusiasmar.

Un sueño hecho realidad: la reunión de Faith No More (y su gira europea estival)

En estos tiempos en que las reuniones de grupos históricos están a la orden del día, no podía faltar uno de mis favoritos: Faith No More. Acabo de leer con inmenso gozo que tras años de continuos rumores, la reunión es una realidad. Y lo mejor de todo: habrá gira europea este verano. Cruzo los dedos para que vengan a Barna, pero sino estoy dispuesto a ir a verlos a donde haga falta.
Y es que tengo una espina clavada con los de San Francisco. Me perdí su único concierto en Barcelona, en diciembre de 1992, pues tenía mi primer examen universitario (Historia Económica Mundial, que aprobé). Me había comprado la entrada para Zeleste, pero tuve que devolverla con gran rabia tras el veto taxativo de mi madre (tenía entonces 18 primaveras recién cumplidas y era de carácter dócil). Una soberana tontería la de no dejarme ir, pues un par de horas menos de estudio no hubiesen solucionado nada. En fin, me juré no volver a perderme ningún bolo más por dicha razón (el verano siguiente disfruté como un enano de Guns N'Roses, un par de días antes de mi examen de Microeconometría, que por cierto suspendí...). Pero se me quedó clavada esta espina, y más cuando mis colegas me contaron tremendas bondades del concierto de Faith No More...
Más de tres lustros después, pienso reparar este desagravio. Desde entonces he visto un par de veces al loco de Mike Patton sobre el escenario (primero con los temibles Fantômas, después en un demencial concierto con John Zorn, en el que Patton se limitó a pegar gritos sobrecogedores...), pero su grupo por excelencia es FNM.
De su discografía, el más laureado es el estupendo "Angel dust" (que adquirí en Andorra en el verano del 92), pero mi favorito es "King for a day... Fool for a lifetime", en el que ofrecen su faceta más agresiva pero también la más amable. Una auténtica obra maestra.

SED REYES POR UN DÍA, Y NO TONTOS PARA SIEMPRE

Grandes grupos (lamentablemente) desaparecidos

Inicio una nueva sección dedicada a grupos musicales extraordinarios que lamentablemente ya no existen. Y empiezo con unos injustamente no muy conocidos: los Transplants. Un trío liderado por el guitarrista Tim Armstrong de Rancid (por cierto, a ver si sacan nuevo disco, porque esto empieza a parecerse ya a "Chinese Democracy"...), al que hay que sumar a Travis Barker, batería de Blink-182 y +44, así como el vocalista Rob Aston
Solo tienen dos discos en su haber, pero recomiendo encarecidamente su debut homónimo del 2002. Éste combina el punk más experimental con todo tipo de influencias como el ska, el dub o la música electrónica, siempre de una manera original y con temas tremendamente redondos.
Posteriormente, en 2005, publicaron "Haunted Cities", que pese a no estar mal, no llegaba al nivel de su predecesor (y en algún tema se les iba la mano con lo comercial). Justamente en esa gira tenían que haber aterrizado en Barcelona, creo que en Bikini, pero desgraciadamente el concierto se anuló por enfermedad, si no recuerdo mal. Una pena, pues poco después el supergrupo se desintegró. Pero siempre nos queda disfrutar de su primer álbum.

FLIPA EN COLORES CON LOS TRANSPLANTS

Las tres recomendaciones que faltaban

Sigo con las tres recomendaciones que me habían quedado pendientes:

El truco del manco: El debut de Santiago Zannou ha sido justamente galardonado con tres Goyas al mejor director revelación, actor y canción original. Rodado en Hospitalet, es un film que retrata la marginalidad de manera completamente realista, y tiene momentos muy duros, como ese plano inicial del Langui en la bañera. Una ración de deprimente realidad, porque no todo pueden ser sueños de Hollywood/Bollywood...


El lector: Kate Winslet seguro que gana el Oscar por su excelente interpretación en esta notable película, en la que Ralph Fiennes tampoco está nada mal. Me quedo con la primera parte del film, que acontece en los años 50, ya que la parte central no está tan lograda. Pese a todo, el final es emotivo y el conjunto ya huele a clásico.


El curioso caso de Benjamin Button: mi favorita de las seis. Y eso que me daba un poco de palo ir a verla, por su temática y larga duración (166 minutos). Sería injusto que no ganara el Oscar a mejor película, pero me temo que "Slumdog millionaire" se lo arrebatará (injustamente). David Fincher, en su tercera colaboración con Brad Pitt tras las también magníficas "Seven" y "El club de la lucha", firma aquí una cinta totalmente alejada de su un tanto sórdida filmografía (recordemos que también dirigió la no menos oscura "Zodiac"). "El curioso caso de Benjamin Button" bien podría ser una nueva fábula de Tim Burton a lo "Big fish". Y contra todo pronóstico, me ha gustado más su parte inicial, con un Brad Pitt envejecido con kilos de maquillaje, que el un tanto ridículo plano del mismo Pitt en plan adolescente. Es cierto que se le podría cortar un poco de metraje, especialmente en las pastelonas secuencias de Pitt y Blanchett en plan tortolitos con el velero... Pero todas las vicisitudes de la vida de Button no tienen parangón, así como esa imposible historia de amor al revés.
Una cinta emocionante de principio a fin. Y mi recomendación más ferviente del año.

Un bodrio y seis recomendaciones cinéfilas

Se me ha acumulado el comentario muchos de los últimos estrenos cinematográficos. La mayoría de ellos no tienen desperdicio.
Empezaré por eso por el bodrio: este es Viernes 13 (2009). Soy un fan reconocido de los slashers y de Jason, pero esta resurección se la podían haber ahorrado. Porque no hay nada en la película de Marcus Nispel que valga la pena. La historia es la de siempre, pero se podía haber currado un poco más los asesinatos al menos. Además, y eso me revienta, nos encontramos con un film asquerosamente político correcto. Me explico, no pueden faltar el negro ni el chino de turno, no se nos vayan a enfadar... Aunque lo paradójico (o insultante) es que como siempre, resultan ser los payasos de la función... Lamentable. Nispel es también el director del remake de "La matanza de Texas", otra basurilla que me dejó más frío que un témpano de hielo. Que aprenda del francés Alexandre Aja y de su excelente "Alta tensión". Eso sí que es cine de terror con mayúsculas, y no esta tontería.

Pasemos a las recomendaciones:
Revolutionary Road: Sam Mendes vuelve a lograr un grandísimo film, que me recuerda a la también enorme serie "Mad men". En ambos, su matrimonio protagonistas han conseguido (aparentemente) el éxito social (su casita en los suburbios, el coche de marras). Pero no son felices. Quizás el final de la cinta de Mendes es un poco forzado e impactante, en su línea, pero no le quita el mérito a una muy buena (y triste) historia, ni a sus dos estupendos actores, Winslet y DiCaprio. Aviso: para ver en un día bueno...


Slumdog millionaire: la más que clara ganadora del Oscar a mejor película. También me gustó mucho, aunque no creo que sea ella la justa vencedora. Me reservo para el final la mejor película. Danny Boyle consigue un conmovedor retrato de la India, pero la cinta tiene sus puntos débiles: la respuestas a las preguntas del concurso están cogidas con pinzas... Si dejamos de lado este aspecto, "Slumdog millionaire" se disfruta, y mucho. Filmada con cámaras digitales que permiten la inmersión total en los barrios más pobres, este largometraje no deja de ser un cuento de amor con final made in USA... O en India, que a la postre es lo mismo.


El desafío. Frost contra Nixon : otra recomendación ineludible. Basada en las entrevistas televisivas que el periodista David Frost hizo al ex presidente Richard Nixon, Ron Howard consigue uno de sus mejores films (después de la lamentable "El código Da Vinci". Aunque tengo ganas de ver "Ángeles y demonios",no puede ser peor...). Una lección de periodismo y dos interpretaciones prodigiosas. Permite conocer la personalidad de Nixon, un tipo más afable de lo que parecía. Y con una necesidad tremenda de ser querido.


En breve, tres recomendaciones más...

Sobre gustos...

Es curioso, en el intervalo de menos de 72 horas me he hecho con entradas para dos conciertos de artistas que no pueden ser más diferentes: Metallica y Madonna.
Seguro que habrán los que se rasguen las vestiduras viendo una incompatibilidad, o peor aún, una falta de criterio galopante.
Pues bien, yo me defiendo de estos intolerantes diciéndoles que disfruto tanto con el rock más salvaje de Metallica, como con el pop más petardo y enganchoso de la ambición rubia...
Porque la vida está hecha de contrastes y de muchos sabores. ¿Y para qué privarse de ellos? Entiendo que quizás a un fan del metal más extremo se la traiga floja Madonna, y viceversa. Pero ojo, porque también hay un sector que no le hace ascos a nada (o casi nada: también tengo mis fobias musicales, por descontado. Un día ya hablaré de ellas...).
Tan solo destacar que la entrada para Metallica me costó lo suyo: estuve esperando un par de horas el pasado lunes, a las puertas de la Fnac del Triangle, y como soy gafe encontrándome fatal. Pero al final las conseguí (posteriormente me enteré que no se habían agotado, como me temía, pero eso ya es otro cantar).
En cuanto a Madonna, tengo que agradecer a unos buenos amigos por pensar en mí. Ambos conciertos serán en julio, y con tan solo un intervalo de 10 días entre ellos (el 11 los de San Francisco y el 21 la Ciccone).
Ahora ya tiemblo ante la adquisición de la entrada para U2...

Prohibido besarse

Me ha hecho gracia la noticia reciente según la cual en la estación de tren de Warrington, localidad situada entre Liverpool y Manchester, se haya prohibido besarse en los andenes, pues se provocaban unas aglomeraciones del copón. El simpático cartelito de dicha prohibición es el siguiente:

Por cierto, para remediar tremendo despropósito, se ha habilitado una "kissing zone" más alejada, pero ya nada será igual.
En fin, decía que me había hecho gracia la noticia, porque me ha recordado a una foto que tomé hace años en uno de mis viajes por el sureste asiático. Más concretamente me encontraba en un parque de la capital de Malasia, Kuala Lumpur, y ante mi asombro, comprobé que los besos en dicho recinto estaban prohibidos. Ahí va la prueba gráfica (sacada de mi otro blog, ya inactivo, El retorno de Filfogo. La entrada corresponde al 5 de julio de 2005):

Pues bien, aquí la razón de dicha prohibición no es por el caos en los andenes, sino de índole totalmente religiosa. Al ser un país musulmán, las muestras de afecto en público están totalmente vetadas. La verdad es que en dicho parque vi a algunos enamorados, pero efectivamente, ninguno de ellos se estaba dando el lote...

"Foo Fighters Live at Wembley Stadium": brutal

Inspirado por el post del estupendo blog "Ladridos crepusculares", la semana pasada me hice con el último DVD musical de los Foo Fighters, "Live at Wembley Stadium". Lo admito, soy fan del grupo de Dave Grohl, y las dos veces que les he visto en directo no me han defraudado. Pura energía. En estudio ya son más irregulares, pero sin duda en sus seis álbums (sin contar los directos) cuentan con temazos de sobra. Si a eso le añadimos un señor estadio de Wembley atiborrado con 86.000 seguidores, está cantado que la cosa no puede salir mal. Añadamos a la fiesta cuatro instrumentistas adicionales (el inefable guitarrista Pat Smear, que también militó en la etapa final de Nirvana, una guapa violoncelista, un teclista y un percusionista/xilofonista) y la presencia de dos invitados de lujo: Jimmy Page y John Paul Jones (guitarra y bajista de Led Zeppelin, por si alguien lo ignoraba), que se prestan a tocar sus clásicos "Rock and roll" y "Ramble On" y ya la tenemos armada.
Lo dicho: el mejor DVD musical en lo que va de año. Lo sé, éste acaba de empezar, pero el nivel está altísimo.

Guilty pleasures (2): Robbie Williams

Sigo con mis Guilty pleasures. Y tal como prometí en su momento, en este caso hablaré de Robbie Williams. Un artista injustamente vilipendiado por haber formado parte de Take That. Al revés que con New Kids On The Block, no fui especialmente fan de los primeros, pero sí que me empecé a interesar por Robbie cuando dejó el grupo. Siempre había sido la oveja negra y díscola, y su primer single en solitario (cuando todavía no tenía ni disco) fue una desfasada versión del "Freedom" de George Michael en la que lucía sin cortarse un pelo sus kilitos de más. Entrañable...
Pero luego sorprendentemente fueron viniendo buenos álbums (excepto sus dos últimos trabajos hasta la fecha, bastante lamentables). Me enganché con el "Sing when you're winning" (2000) (incluso firmé la crítica - positiva- para el difunto Rock Sound), y disfruté todavía más con su réplica en clave de swing y jazz "Swing when you're winning" (2001), pese a que éste fuera un álbum de versiones. Sin embargo, creo que la cima de Robbie llega con "Escapology" (2003), que a parte de editarse en su cénit de éxito, resulta también su mejor elepé hasta la fecha. Y recuerdo la memorable actuación que hizo en el Palau Sant Jordi para presentarlo. Un servidor y un reconocido crítico jeviata (cuyo nombre me guardaré mucho de revelar) disfrutamos como enanos en las gradas del Palau (conseguimos colarnos y tomar unas posiciones de lujo).
Posteriormente, Williams perdió fuelle con el muy flojo y aburrido "Intensive care" (2005) y ya perdió los papeles con "Rudebox" (2006), un álbum caótico, hecho de retales de lo más indigestos. Esperemos que Robbie no vuelva con sus compinches de Take That, como se rumorea, y regrese con buenas canciones. No por algo es el artista británico más premiado. Para los no iniciados, prueben con el Grandes éxitos. Juro por Dios que tiene grandísimas canciones.

Achtung Band: U2 revisited

El pasado sábado acudí a la sala Bikini para ver a Achtung Band, grupo de aquí que versiona a U2. No tenía grandes expectativas, más que disfrutar de un grandísimo repertorio defendido de manera digna. Pues bien, pese a un inicio un tanto frío (los primeros temas sonaron un tanto ralentizados y cuadriculados), Achtung Band acabó por sorprenderme muy gratamente. Su cantante, tocado con una gorra y gafas de sol, daba el pego por su parecido físico con Bono: tanto por su look como por su forma de moverse, pero esencialmente por su magnífica voz. Lo que podría haber sido una mala copia se convirtió en una parecidísima imitación. A su lado, el clon de The Edge no lo era tanto (por mucho que gastara idénticas camiseta y gorra de marinero, su rotundo físico saltaba a la vista...), aunque su labor guitarrística no le fuera a la zaga. Lógicamente, no llegó a la maestría del músico irlandés, pero se defendió más que dignamente. El look de la sección rítmica ya es harina de otro costal. Un bajista greñudo y con perilla que no pretendía asemejarse físicamente a Adam Clayton, aunque a nivel musical tampoco desentonase, y un batería que fue el punto débil de la noche. Aquí sí que se echó de menos a Larry Mullen Jr.
El bolo, de más de hora y tres cuartos, estuvo compuesto por una larguísima lista de clásicos de todas las épocas. El repertorio, para quitarse el sombrero pues. Pero lo más asombroso es que incluso se dió la incongruencia de estos tiempos modernos en los que Achtung Band tocaron el primer single del nuevo disco de U2, "Get on you boots", que todavía no ha salido a la venta oficialmente (aunque corra por internet desde hace semanas).
¿Quién le iría a decir a Bono y compañía que un grupo tocaría en directo uno de sus temas antes incluso que ellos? Paradojas de internet...
Lo dicho, fue un show excelente. Al menos servirá de consuelo en el caso de quedarme sin entradas para su futura gira (que se rumorea que empezará en el Estadi Olímpic). Y ahora a esperar al 2 de marzo...

!!!Metallica vienen a Barna el 11 de julio!!!

Grandísima noticia de la que me acabo de enterar. Metallica finalmente tocará en Barcelona el próximo 11 de julio. Será en el Fórum, dentro del festival metálico Sonisphere. Y por si fuera poco, también estarán Slipknot y Mastodon.
El lunes 16 de febrero volaré a comprarme una entrada (70 euros).
Me dió mucha rabia que Metallica no incluyeran Barcelona en su nueva gira, pero siempre confié en que finalmente recapacitaran... y así ha sido, gracias a Dios.
He visto a Hetfield y compañía un par de veces. La primera, en el Sant Jordi durante la presentación del vilipendiado "Load" (disco que a mi me encanta. Y no es para llevar la contraria). El escenario, en medio de la pista y ovalado, permitió que los fans pudieran acercarse de manera inusual al conjunto. Fue un gran bolo.
Mejor todavía estuvo en el Estadio Olímpico, dentro del Doctor Music Day, hace cuatro años aproximadamente. Metallica acababan de sacar al mercado su peor disco, el mediocre "St Anger", pero el repertorio, basado en sus clásicos más viejos (tocaron casi todo el "Master of Puppets") fue brutal.
En esta nueva gira sí que tocan muchos temas nuevos, pero es que "Death Magnetic" es de lo mejor que han hecho nunca estos cuatro fantásticos (para mí fue el mejor disco del año pasado). Ya me cae la baba tan solo de pensar en el 11 de julio...

"La carretera", de Cormac McCarthy

Hace unos días acabé de leer "La carretera", de Cormac McCarthy. Este norteamericano de 75 años es también el autor de la celebrada "No es país para viejos" (en ese caso solo vi la estupenda peli de los hermanos Coen).
"La carretera" ganó el premio Pulitzer del año pasado, y ya ha sido adaptada al cine. En breve la podremos ver en la gran pantalla, con un Viggo Mortensen en el papel protagonista. La trama es muy sencilla: un hombre acompañado de su hijo intenta llegar a la costa, en medio de un mundo desolado y apocalíptico. El camino será largo y lleno de dificultades. Todo el territorio está desolado, y los pocos supervivientes suelen ser bandidos y saqueadores sin escrúpulos.
El libro no cuenta con capítulos, sino que es una sucesión de párrafos. Los diálogos entre padre e hijo son memorables, así como la descripción de una tierra convertida en ceniza y más ceniza. Es una obra breve, de poco más de 200 páginas, pero a diferencia del "Apocalipsis" de Stephen King, no le sobra ni una coma. Al revés, ojalá tuviera el doble o el triple de páginas. Porque la maestría en la narrativa de McCarthy te deja con la miel en los labios cuando descubres que has finalizado el libro. Tengo ganas de ver la película, aunque me temo que pueda resultar un punto lenta. Sea como sea, ésta es una lectura más que recomendable. Yo diría que obligatoria.



PD Ahora he empezado a leer "Todo lo que sé lo aprendí de la tele (Filosofía para el teleadicto común)", un excelente ensayo del profesor de filosofía yankee Mark Rowlands, en el que explica distintos conceptos filósoficos que podemos encontrar en series tan míticas como "Los Soprano", "Sexo en Nueva York", "Friends", "24", "Seinfeld", "Los Simpson", "Frasier" y "Buffy Cazavampiros". Y cuando lo termine, tengo previsto empezar con el nuevo y tercer libro de Kiko Amat, "Rompepistas".

Anexo del psicópata de Christian Bale: la grabación original

Puede ser un actor como la copa de un pino, no lo pongo en duda. Lo que sí que es indudable es que Christian Bale apunta a que es un psicópata total. Ya se le acusó de haber agredido a su madre (fue detenido en Londres por dicho motivo, durante la presentación de la última película de Batman). Pero es que la grabación de la pedazo bronca que le mete al director de fotografía de Terminator 4 es realmente antológica. Aquí va el fragmento original, que ha dado pie a una de las canciones más brutales de los últimos meses (ver más abajo). Contad los fucks...

Christian Bale se vuelve jodidamente loco

Seguramente ya habréis escuchado la bronca (39 fucks!) que Christian Bale le pega a un técnico de fotografía por distraerle al andar en el set del rodaje de Terminator 4.
Pues bien, algún cachondo ya ha hecho un remix con ésta. Aquí va el vídeo, que es simplemente brutal:

Angry Christian Bale Remix! | Music Videos | SPIKE.com

Grandes discos de versiones: Rage Against The Machine, 'Renegades'

Empiezo una nueva sección dedicada a los discos de versiones. Ya sé que en principio este género no reviste de gran interés, y parece un puro trámite para acabar contrato con la discográfica de turno... Pero en algunos casos, como precisamente éste, el álbum adquiere una calidad inmensa, que incluso puede llegar a igualar o superar algún desliz de la propia discografía del grupo.
He decidido no hablar del clásico debut de Rage Against The Machine, porque peser a ser eso, un clásico, está un pelín trillado. Sin embargo, el disco que cierra su breve discografía (tan solo 4 largos, incluyendo éste) es singular. "Renegades" se publicó cuando la banda ya se había desintegrado (o estaba prácticamente finiquitada). Y es una pena, porque Zach de la Rocha y sus tres compinches consiguen hacer irreconocibles algunos clásicos de los Stones, de Dylan o de Bruce Springsteen, entre otros. Llevan unos temas excelentes a su terreno y les insuflan una nueva vida. Aunque no hayamos escuchado los originales, no pasa nada. "Renegades" es un soplo de frescura tras "The Battle of Los Angeles", su elepé precedente, donde ya acusaban una repetición en su fórmula de rap-rock explosivo.
Ahora que se han vuelto a reunir, aunque todavía no tengan previsto grabar nada nuevo, estaría muy bien que de hacerlo siguiesen por esta línea, explotando el lado más funky (que ya estuvo presente en el último y gran disco de Audioslave, "Revelations").

VOLVEROS RENEGADOS DEL FUNK-ROCK MÁS BRUTAL

Día de lágrimas

Ayer fue un día lleno de lágrimas (ajenas). Primero vi las del pobre Federer, que no pudo contenerlas. El fenómeno que es Rafa Nadal se portó como un caballero, y se le notaba incómodo con su victoria. No quiso exteriorizar su alegría y eso le honra. Fue un bello momento.
Por la noche, más lloros en la gala de los Goya. Cuando llegué a casa enganché justo los premios a actores revelación. Primero ganó el protagonista de "El truco del manco" (tendré que ir a ver la peli), y muchos compañeros suyos lloraban como magdalenas en la platea. Luego le tocó el turno a la guapísima niña de "Camino", que tampoco pudo resistir el llanto. Y finalmente, otra imagen que se me quedó grabada fueron los lagrimones de Maribel Verdú, tras el recuerdo a los miembros de la academia fallecidos este año.
Por cierto, me alegro que "Camino" haya triunfado (genial el discurso de Jaume Roures reivindicando la felicidad y atacando al Opus Dei). Se lo merecía, pues a mi juicio, fue la mejor película nacional del año pasado. Y con diferencia.